Conclusiones de la I Jornada Técnica Nacional sobre Producción de Patata de Siembra
La Asociación de Productores de Patata de Siembra de España (APPSE) celebró en Burgos, el 16 de junio 2015, su primera jornada técnica. APPSE se constituyó en Burgos en 2013 y está formada por 15 socios (cooperativas, empresas y autónomos), que representan a más de 200 agricultores implantados en más de 150 localidades de Burgos, Palencia, Álava y Navarra. Aglutina el 85% de la superficie destinada en España a la patata de siembra. Anualmente sus socios producen más de 35.000 t de semilla certificada de patata en alrededor de 2.150 ha, manteniendo así más de 100 empleos directos.
Los principales retos que afronta el sector son los cambios normativos a nivel europeo y nacional, y las necesidades del agricultor de patata de consumo para adaptarse al mercado. En estos temas se centró la Jornada, en la que intervinieron Ángel Garzón Sáez, gerente de la Fundación Caja Rural de Burgos, en cuya sede se realizó el encuentro, Javier Fernández Suances, presidente de APPSE, José Antonio Prosper Moreno de Almacenes Rubio, Fernando Alonso Arce del Centro de Control de Patata de Siembra CyL,, José Ramón Aguado Aguado, presidente de ASONAL, y José Ignacio Velasco Calvo, gerente de APPSE.
Las conclusiones del encuentro, indica Javier Fernández Suances, Presidente de APPSE son las siguientes:
“- El consumidor de patata valora principalmente el aspecto y frescura de la patata, y busca patatas que le sirvan para varios usos al mismo tiempo (freír, cocer y guisar).
- Cada vez se consume menos patata y en envases más pequeños.
- Hay nuevos nichos como las patatas “gourmet” o patatas muy grandes para hostelería.
- Los productores de patata de siembra deben concentrar la oferta, con menos variedades y más adaptadas al consumidor final.
- La patata de siembra española tiene precios más competitivos y es de igual calidad que la europea, enfermedades como la sarna plateada son cada vez más comunes en semilla importada. Hace falta dar a conocer este aspecto a los agricultores.
- Los recientes cambios normativos en relación a la producción de patata de siembra que limita a ocho el número máximo de generaciones antes de alcanzar la semilla certificada, va a suponer una mejora en la calidad de la semilla nacional, esto es muy importante para nuestros clientes.
- La normativa de gestión integrada de plagas obligará a tener mayores conocimientos fitosanitarios y a utilizar el asesoramiento de los técnicos de las entidades productoras de una manera más regulada.”
Llama la atención en estas conclusiones el aparente desinterés del consumidor español por la diversificación varietal, cosa que no ocurre en otros productos, como la manzana, que ha ganado con la introducción de nuevas variedades a lo largo de estos años. Ante la evolución que sufre el mercado español de la patata, con cifras decrecientes de producción y de consumo, la primera de las conclusiones parece esperanzadora, al abrir un campo potencial de crecimiento y un aspecto a tener en cuenta en las campañas de promoción del consumo que reclaman las asociaciones que agrupan a los productores de este producto.
Frente a lo que se observa que ocurre en países del norte de Europa, en que el sector saca partido de la diversificación de usos, asociada a la varietal, siendo éste un potente elemento de marketing, en España parece ser un camino en el que hay aún mucho por hacer y que podría ayudar a revertir el descenso del consumo y la creciente presencia de patata de otras orígenes en el mercado nacional, punto este último que suscita especial preocupación.
Fuente: www.postcosecha.com