Magnífico desarrollo de la patata y expectativa de tener un buen margen
El buen estado del cultivo y la fuerte caída de la producción en el sur de la península permiten ser optimistas en Castilla y León. La última semana de mayo comienza la campaña para promocionar el tubérculo nacional, bajo el eslogan ‘Patata nueva, la nuestra’
Las temperaturas del mes de mayo han llevado a la planta de patata a un desarrollo extraordinario, lo que hace prever buenos rendimientos por hectárea y un producto de calidad. La duda vuelve a situarse en el comportamiento de la demanda y en este capítulo también hay espacio para el optimismo, puesto que el mercado tendrá ‘hambre’ de tubérculo a mediados de julio, cuando se generalicen los arranques en Castilla y León.
El mes de mayo es cuando se suele dar el cambio y la patata temprana del sur de la península reemplaza a la de conservación, aunque ese relevo no se está produciendo este año con normalidad. Las siembras se retrasaron por la meteorología y en algunos casos se ha adelantado el arranque por la demanda europea, una doble presión que ha reducido de forma notable los rendimientos. Para más inri, en Andalucía y Cartagena había disminuido la superficie de siembra en un 20%, porcentaje similar al registrado en Castilla y León.